ASESORÍA DE TESIS DE GRADO

Mis queridos seguidores, a partir de la presente fecha comenzaremos a ofrecer servicios en asesoría de tesis de grado: pre y posgrado. Incluimos orientación que va desde la escogencia de temas, diseño del proceso investigativo hasta redacción y presentación final del TDG escrito.

Asesoramos metodología de acuerdo a Normas APA.

Orientamos en la adecuada sustentación del TDG.

Diseño y elaboración de presentación del TDG en Power Point.

Orientamos en la defensa oral con técnicas de oratoria.

Garantizamos calidad para que obtengas la aprobación del TDG.

Llámanos y gustosamente te atenderemos y despejaremos todas tus inquietudes.

domingo, 3 de abril de 2022

 

¡De dónde venimos!

Hace unos días, mi apreciada manicurista me preguntó:

—Señora Yayita, ¿usted siempre ha escrito?

—Siempre amé leer desde muy niña y creo que el ser una ávida lectora me facilitaba el escribir —le contesté después de pensarlo momentáneamente—, pero no escribía novelas ni cuentos; redactaba introducciones, conclusiones, resúmenes, presentaciones, entre otros de la vía educativa. Era tanta mi facilidad, que hacía los míos y los de muchos compañeros desde el colegio hasta la universidad. Se me daba fácil: CREAR.

Luego, me quedé pensando en la raíz: ¡De dónde venimos!

Vengo de una raíz parental de lectores apasionados y, aunque conviví mucho más con mi familia materna (recuerden que mi papi murió muy joven), a mis primos paternos Clara y Luis les debo mi devoción por Mafalda y los recuerdo leyendo siempre... Claro, hijos de mi tío el escritor Adolfo Rodríguez, cuya casa era una especie de biblioteca.

Durante 30 años, mis abuelos maternos tuvieron una finca en Acarigua, estado Portuguesa, Venezuela https://www.google.com/search?client=firefox-b-d&q=acarigua+estado+portuguesa+venezuela, sede de larguísimas vacaciones en aquellos años cuando la tecnología no había invadido nuestras vidas. En la finca no había electricidad. La verdad, no hacía falta, aunque había una planta eléctrica. Por supuesto, no había televisores, y mi tío Enrique y yo teníamos un radiecito a pilas en el que escuchábamos los juegos de Los Tigres de Aragua https://www.tigresdearaguabbc.com/ .

Nuestras vacaciones eran correr, bañarnos con la lluvia y en el río, acompañar el ordeño, arreo de vacas, vacunación, recoger maíz, comer las suculentas comidas y los riquísimos dulces que preparaba mi abuelita Nana, preparar actos culturales para presentar en las noches, juegos de mesa de todo tipo y LEER, por supuesto.

Ahora bien, ¿qué leíamos?... De todo, todito, porque todo el mundo les llevaba a mis abuelos revistas, folletos, libros, almanaques, periódicos viejos.

En revistas: Vanidades, Buenhogar, Bohemia, Zeta, Muy interesante, Gerente, Producto, Cosmopolitan, Hola, Farándula, Variedades, Selecciones (la favorita).

En novelas: Corín Tellado, Sherlock Holmes, Ágatha Christie, vaqueros, eran las favoritas y muchas más.

En libros: Enciclopedias completas, textos educativos, el Almanaque Mundial (síiiii, y mi abuelito se los leía completos). 

Libros de vida: Todos los clásicos, más lo que se fue creando en bestseller que mi tía Carmen se encargaba de comprar.

Éramos lectores por vocación y eso nos brindó una amplia cultura de vida. Casi todos podíamos mantener una conversación sobre países y sus costumbres como que si hubiésemos estado allí. 

De dónde vengo: las letras y palabras tienen significado, importan y aún marcan mi vida. Amo la belleza que transmiten y todo el bien que pueden hacer. Hay libros que valen la pena tan solo por una frase. Hay canciones cuyas letras son un libro. 

Sí. Creo que siempre escribí, incluso, sin plasmarlo en papel porque en mi mente se han erigido las más maravillosas frases para crear esta vida rica en familia, amigos, vivencias y amores.


Por Rosangela Rodríguez
Todos podemos escribir un libro
IG @rosangelaescritora5
3 de abril de 2022